Segunda Tarea

Los animales van a la moda.

Había una vez un bosque en que todos sus animales vivían en armonía felices y contentos. 

Un día, una familia fue a pasar el día al campo, y uno de los niños olvidó sus calcetines. 

Al poco de irse la familia, un mapache pasó por allí, encontró los calcetines y decidió probárselos, le gusto tanto como le quedaban y le hicieron tanta gracia, que ya no se los quitó y fue recorriendo el bosque con sus calcetines y enseñándoselos a los demás animales del bosque.

- MAPACHE: Hola conejo, ¿has visto estos calcetines que llevo?, me los he encontrado en el bosque.

- CONEJO: Pero, ¿qué es eso? ¿unos calcetines? La verdad es que son muy bonitos y te quedan bien. 

- MAPACHE: ¿Enserio? Muchas gracias, voy a enseñárselos a los demás. 

Al verle todos los animales hablaban de su nuevo aspecto y decidan lo que pensaban al ver que este llevaba ropa.

- MAPACHE: Mire señor ciervo ¿le gustan mis calcetines? 

- CIERVO: Pues la verdad amigo mapache, me gustan mucho.

- MAPACHE: Gracias señor ciervo, si algún día encuentro otros se los regalaré. 

A la mayoría de los animales del bosque les encantaban el nuevo aspecto del mapache, así que en poco tiempo empezaron a aparecer por el bosque zorros con camiseta, conejos con botas, topos con gorra, y hasta ardillas con guantes. 

El doctor oso, el médico del bosque, no estaba de acuerdo con que los animales llevaran ropa y decía a todo el  que se cruzaba: "Eso no puede ser bueno. Los animales no llevamos ropa porque no nos hace falta", pero nadie le hacía caso y todos le decían que era un anticuado y que no sabía ir a la moda.

Pero no pasó mucho tiempo hasta que empezaron a verse las primeras consecuencias del furor por la moda en el bosque: un zorro se enganchó la camiseta varias veces con los arbustos haciéndose así heridas en su piel, un topo trató de meterse en su madriguera sin quitarse la gorra, y se quedó atrapado a la entrada durante todo un día, uno de los pájaros se lió las alas con la ropa que llevaba y aterrizó sobre unos cardos, pinchándose hasta los huesos y una ardilla se quedó un día sin comer al no poder abrir las bellotas por culpa de sus guantes. Incluso el mapache, con sus calcetines, resbaló en una de las rocas del río y casi se ahoga al caer al agua.

Los accidentados pasaron por la consulta del doctor y le dijeron lo que les había ocurrido. 

- ZORRO: Doctor oso, tengo heridas en mi piel porque mi camiseta se ha enganchado con los arbustos.

- PÁJARO: Yo me he caído en unos cardos, se me liaron las alas por culpa de esta ropa.

-TOPO: Pues yo doctor, me quedé atrapado en la entrada de mi madriguera porque no me cabía la gorra.

- MAPACHE: Y yo casi me hago por resbalar con mis calcetines en una roca del rió.  

- DOCTOR OSO: Anda, quitaos esa ropa, que un día os vais a matar. 

Y así hicieron los animales, se quitaron las camisetas, gorras y demás prendas y entonces dejaron de tener accidentes, y se dieron cuenta de que ellos no necesitaban nada de eso, y que había sido una gran tontería empezar a llevar ropa de moda solo porque lo hacían los demás.